jueves, 2 de abril de 2009

Nueva polémica por unas palabras de Benedicto XVI

Ya puestos a hablar del Papa, he encontrado esta parodia que tiene su gracia. No me extrañaría que cualquier día pasase lo que aquí se cuenta ya que hay mucha gente que no soporta lo que el Papa representa. Que lo disfrutéis.

Roma, 29 (LIP).- La frase pronunciada por Benedicto XVI durante el último ángelus en la plaza de San Pedro continúa suscitando una viva polémica dentro y fuera de la Iglesia. Como se recordará, el pasado domingo, cuando se asomó a la ventada de su apartamento para dirigirse a los fieles, el Papa exclamó “¡Qué buen día!” Ese comentario fue calificado de “irresponsable” por el portavoz del comisario para las ayudas humanitarias de la comisión europea, Louis Michel. “Son palabras, dijo, que pueden provocar que se baje la guardia en la lucha contra el flagelo de la sequía”.
En una línea similar se expresaron los ejecutivos de varios países europeos. Eric Chevalier, portavoz del Quai d’Orsai, ha manifestado que Francia considera esa frase “un atentado a la laicidad, en cuanto supone una intromisión del Papa en cuestiones que van más allá de la esfera religiosa”. Por su parte, el gobierno belga ha convocado al nuncio del Papa en Bruselas para entregarle una nota verbal de protesta.
Por lo que se refiere a España, la primera reacción fue del diputado José Blanco, vicesecretario general del PSOE, quien acusó a la Iglesia de “tener una postura hipócrita, de caminar hacia atrás y de defender posiciones rancias y antiguas”. El portavoz del grupo parlamentario socialista, José Antonio Alonso, afirmó que “el Papa vuelve a demostrar lo alejada que está la Iglesia de la sociedad y lo urgentes que son las reformas de modernización que propone el gobierno”. Anunció que, como gesto concreto, el primer ministro José Luis Rodríguez Zapatero ha decidido enviar un millón de paraguas gratis a zonas gravemente afectadas por las precipitaciones.
Desde las páginas de “El País”, un grupo de científicos calificado como “la elite de la ciencia española”, ha denunciado el uso ideológico que el Papa hace de la meteorología: “el buen tiempo es una cuestión subjetiva”, afirman en un manifiesto. “El Papa no puede pretender imponer sus preferencias a los demás”. Esas consideraciones han llevado al diario “Público” a titular a toda página en su portada de hoy: “La Iglesia, culpable del tsunami”, ilustrándolo con una fotografía de archivo de la tragedia.
En el frente interno de la Iglesia, el teólogo Juan José Tamayo escribe en “El País” que "con estas declaraciones, Ratzinger confirma su propósito de liquidar el espíritu del concilio Vaticano II. El abismo entre este Papa prisionero de la Curia y la figura paternal de Juan XXIII es cada día mayor”. Por esa razón, la asociación “Nosotros Somos Iglesia” anunció varias movilizaciones en favor del sacerdocio femenino.
Pero el frente de la protesta ha atravesado también el Atlántico. Según informa el diario “El Mundo”, los abogados de la Asociación de Víctimas del Mal Tiempo, de Estados Unidos, han presentado una demanda que podría costar al Vaticano unos quinientos millones de dólares.
En unas declaraciones al mismo diario, el portavoz de la Coordinadora Estatal de Gays y Lésbicas ha manifestado su repulsa ante “esta nueva muestra de actitud homofóbica de la Iglesia”, y denuncia “el uso sexista” que el Vaticano hace de los términos “día” y “jornada”.
La polémica se acentuó cuando el Vaticano divulgó una trascripción de las palabras que difería de las realmente pronunciadas por el Papa, pues en ella se leía “Probablemente hace una buena jornada”, en vez del “¡Qué buen día!” que registraron los testigos presenciales. El portavoz de la Santa Sede, padre Federico Lombardi, precisó que, en cualquier caso, las palabras de Benedicto XVI se insertaban en “la tradición de la Iglesia de afrontar el mal tiempo con buena cara”.

Visto en La Iglesia en los medios


1 comentario:

NIVAL dijo...

Mariano Medina, Santo Súbito.