Que la retirada de los crucifijos es algo absurdo, no se le escapa a nadie, a no ser que sea de la progresía inmunda que venera a ZP, Zerolos y demás. Me llama también la atención como hay mucha gente no cristiana o atea que defiende la idea que los crucifijos sigan en su sitio, aunque sólo sea por el peso cultural que tiene. Llevo algunos días leyendo declaraciones en este sentido. Pero he encontrado unas que han llamado fuertemente mi atención. Me refiero a las de Miguel de Unamuno, años ha, sobre esta vieja disputa. Aunque no soy un gran conocedor de Unamuno, me consta que de religioso tenía lo que yo de socialista.
Miguel de Unamuno, a propósito de los crucifijos en las escuelas:
"La presencia del Crucifijo en las escuelas no ofende a ningún sentimiento ni aún al de los racionalistas y ateos; y el quitarlo ofende al sentimiento popular hasta el de los que carecen de creencias confesionales. ¿Qué se va a poner donde estaba el tradicional Cristo agonizante? ¿Una hoz y un martillo? ¿Un compás y una escuadra? O ¿qué otro emblema confesional? Porque hay que decirlo claro y de ello tendremos que ocuparnos: la campaña es de origen confesional. Claro que de confesión anticatólica y anticristiana. Porque lo de la neutralidad es una engañifa".
"La presencia del Crucifijo en las escuelas no ofende a ningún sentimiento ni aún al de los racionalistas y ateos; y el quitarlo ofende al sentimiento popular hasta el de los que carecen de creencias confesionales. ¿Qué se va a poner donde estaba el tradicional Cristo agonizante? ¿Una hoz y un martillo? ¿Un compás y una escuadra? O ¿qué otro emblema confesional? Porque hay que decirlo claro y de ello tendremos que ocuparnos: la campaña es de origen confesional. Claro que de confesión anticatólica y anticristiana. Porque lo de la neutralidad es una engañifa".
¡Si ZPs y Zerolos fuesen capaces de leer un poco!
1 comentario:
Si esos sujetos leyeran a Unamuno lo calificarían de facha.
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